Jornada Académica: Amazonía, pasado y presente

La historia de la Amazonía es una historia de invasiones, saqueos y despojos… pero también de corajes, valentías y victorias.  Es una historia que está por rescribirse. Como contribución al desafío de rescribir la historia, se presentó en Trinidad una serie de libros que constituyen aportes a la historiografía nacional y continental que incluye: Cuatro viajes a la Amazonía boliviana de la historiadora y antropóloga rusa Vera Tyuleneva; El martirio de Laureano Ibáñez. Guerra y religión en Apolobamba, siglo XVII del periodista e historiador catalán Pablo Ibáñez Bonillo y Las inmensas tierras de la Nación Toromona del historiador argentino José Ignacio Wasinger Espro.

Reflejos del Isiboro Sécure en la Amazonía boliviana-Prólogo

“Me encomendaron una misión: barrer de la región todo resto de romanticismo decadente y paternalismo enfermizo y poner a estas provincias y a estas gentes a rendir para el bien común. Aquí hay petróleo, hierro, cobre, fosfatos y mil riquezas más que necesitamos si queremos convertirnos en una nación poderosa, progresista y moderna… (…) Resulta lamentable admitirlo pero los tuareg no tienen razón de existir en pleno siglo veinte, al igual que no la tienen los indios amazónicos, o no lo tuvieron los pieles rojas americanos.¿Se imagina a los sioux correteando aún por las praderas del Medio-Oeste,persiguiendo manadas de búfalos por entre los pozos petroleros o las centrales atómicas? Hay formas de vida que cumplen un ciclo histórico y están condenadas a desaparecer y, lo queramos o no, eso ocurre con nuestros nómades. Hay que adaptarlos o exterminarlos”.Alberto Vázquez-Figueroa: Tuareg Hay otros mundos pero que están en éste”Paul Eluard

Un año de impunidad

Ese 24 de septiembre de 2011, más de 1600 hermanas y hermanos indígenas lograron romper de manera pacífica el cerco policial que durante semanas se había apostado en la carretera impidiendo la provisión de agua para los marchistas.  A pesar de las reiteradas denuncias y aún de la presencia de representantes la Defensoría del Pueblo, Asamblea Permanente de Derechos Humanos, Alto Comisionado de las Naciones Unidas, la policía se justificaba con el argumento de que cumplía órdenes, y negaba el derecho al agua incluso a los niños que acompañaban la marcha.