La izquierda marrón

(ALAI AMLATINA).- Está quedando en claro que para los gobiernos progresistas o de la nueva izquierda, las cuestiones ambientales se han convertido en un flanco de serias contradicciones. El decidido apoyo al extractivismo para alimentar el crecimiento económico, está agravando los impactos ambientales, desencadena serias protestas sociales, y perpetúa la subordinación de ser proveedores de materias primas para la globalización. Se rompe el diálogo con el movimiento verde, y se cae en una izquierda cada vez menos roja porque se vuelve marrón.

Gobiernos neoliberales y progresistas del Abya Yala: Mismo modelo, mismo pensamiento, distinto discurso

En todo el Abya Yala los gobiernos, abiertamente neoliberales, de izquierda o “progresistas”, coinciden en una actitud: la satanización del movimiento indígena, al que categorizan en “indios buenos” e “indios malos” según el grado de aceptación o rechazo a sus políticas. Una maniobra más para intentar dividir y debilitar a los pueblos y las organizaciones que defienden sus derechos.

Masistas pretenden liquidar la Ley 180 que protege al TIPNIS

Los legisladores del MAS Miguel Ángel Ruiz y Sonia Guardia presentaron al Tribunal Constitucional un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley Corta 180 que declara intangible al Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS). “Es un crimen declarar intangible a una zona en la que habitan seres humanos que necesitan servicios de salud, educación y carreteras”, justificó la senadora Guardia.

TIPNIS: Crimen político, económico, social y ambiental

PRIMERO. Dada la compleja situación productiva mundial actual, convertida en escenario de innumerables cadenas de causas y efectos, siempre crecientes  –que impone la fuerza del poder económico–  todo problema que sufre la  naturaleza es resultado inevitable, como fatal, de aquellas interacciones. No interesa ni preocupa a los causantes que el laboratorio de la naturaleza sea ya impotente para restaurar la normalidad ambiental. Ante la inmisericorde sobre-explotación de los recursos naturales, la respuesta del obediente comercio internacional es moverse al mismo ritmo de intensidad que le impone la aceleración del proceso.