Una marcha más bien triste

En estos momentos sigue avanzando penosamente la marcha indígena encabezada por las comunidades del Conisur, es decir de la zona ya intervenida del TIPNIS, que pide la anulación de la llamada ley corta y la construcción nomás de la carretera Cochabamba-Trinidad atravesando el corazón del Parque Nacional del Territorio Indígena Isiboro Sécure; y aseguran que, a pesar de las muchas penalidades que vienen padeciendo, llegarán a La Paz.

Manifiesto público de los pueblos indígenas en contra de la marcha ilegítima del Conisur-Gobierno

En defensa de la VIII Gran Marcha por el TIPNIS, los territorios, la vida, la dignidad y los derechos indígenas, y ante una difusión mal intencionada de una marcha de pueblos indígenas contra los acuerdos del TIPNIS, la Ley N. 180 y la representación de los comunarios de los pueblos indígenas, las organizaciones del movimiento de las Tierras Bajas dirigidas por la CIDOB, e integradas por la CPEM-B, CPIB, CMIB. GCTs (Gran Concejo de Tsimane), TIPNIS Sub central Sécure, hacen conocer a los ciudadanos bolivianos:

Inicio del fin de una era maya

Nuestra generación está hoy a un año de ser testigo del principio o del final de un baktún o período largo de tiempo, según el calendario maya. Este 21 de diciembre comienza la cuenta regresiva que el calendario elaborado por sacerdotes y astrónomos de esa cultura ancestral mesoamericana marca como el final de una era y el comienzo de otra.

Pongueaje y etnocidio en el TIPNIS

En ocho años (2003-2010) se exterminaron ocho comunidades indígenas en el polígono 7, la zona colonizada del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS). El área se llenó de Sindicatos Cocaleros que amenazan, discriminan, agreden, trafican con tierras y utilizan a mojeños y yurakarés como “mano de obra” en sus chacos. Esa es la escalofriante verdad que esconde la contramarcha de colonizadores y cocaleros, auspiciada por Evo Morales y el Conisur.

Los kuna yala de Panamá

En el Caribe panameño, desde la provincia de Colón a Darién, hay una larga faja de territorio costero con poco más de tres mil 200 kilómetros cuadrados, que debería ser considerada historia viva de la etnografía nacional. Frente a esa delgada franja del litoral hay 365 islas que forman el archipiélago de San Andrés, famosas por sus cocoteros.