El Manejo Integral y Sustentable de los bosques, determina dos conceptos, amplios y ambiciosos, el “Manejo Integral”; y que este manejo sea “Sustentable”, analizando cada uno de ellos tenemos las siguientes consideraciones.
Sobre el “Manejo Integral”; el aprovechamiento de los recursos forestales, abarca los Recursos Forestales Maderables, entendidos, como aprovechamiento de la madera y celulosa de los árboles, esta es la forma habitual de explotación de los bosques.
El aprovechamiento de los Recursos Forestales No Maderables, básicamente se refiere al aprovechamiento de otros productos forestales diferentes a la madera. Es decir entramos en una lógica más originaria de aprovechar los recursos de los bosques; se revive la tradición recolectora de los pueblos originarios, que aprovechaban la castaña, la goma y las diferentes semillas y resinas de los bosques, con fines medicinales y artesanales, pero ahora, se le añade un enfoque comercial. Pero también dentro de estos recursos se encuentra una nueva forma de ver al bosque, y esta no contempla una visión material de los recursos y no se concentra en el aprovechamiento específico de un determinado recurso. Esta visión de aprovechamiento, contempla al bosque como un todo, a través del “ecoturismo”, que aprovecha el paisaje natural y se basa en el disfrute de la naturaleza.
El “Manejo integral” del Bosque, debe establecer políticas, que abarca el aprovechamiento de los Recursos Forestales Maderables, como también de los No Maderables, pero además debe contemplar de forma clara a todos los actores participantes.
Según datos presentados por Jorge Ávila, de la Cámara Forestal de Bolivia (CFB); en Bolivia hay alrededor de 28 millones de hectáreas aptas para el aprovechamiento forestal y según la ABT la suma alcanza a más de 20 millones de hectáreas. De ese monto, el sector indígena, tiene 12 millones de hectáreas consolidadas. Es decir que los Pueblos Indígena Originarios, tienen el control de más del 60%, de los bosques que pueden aprovecharse en el país, pero esta cifra excluye, los territorios de los Pueblos Indígenas Originarios, que se encuentran en sobre posición a Áreas Protegidas y que no pueden ser aprovechados. Como dato para ilustrar este punto, las 22 Áreas Protegidas de interés nacional, están en sobre posición a 14 territorios de pueblos originarios y estas ocupan el 15% de la superficie del territorio nacional.
Tomando en consideración los 12 millones de hectáreas, para aprovechamiento forestal, más los bosques que no pueden ser objeto de aprovechamiento, que se encuentran en el territorio de los Pueblos Originarios, nos encontramos que los pueblos originarios se constituyen en el actor principal y decisivo, cuando se habla del manejo del bosque en Bolivia.
El concepto de “Manejo Sustentable”, inevitablemente tiene que ver con el elemento temporal, este manejo busca generar los mecanismos, por los cuales se garantice la permanencia en el tiempo, del aprovechamiento de estos recursos. Es decir, satisfacer las necesidades de las generación presente, sin afectar la capacidad de satisfacer las necesidades de las generaciones futuras.
Para lograr esto objetivo, el factor determinante, es no solo lograr, la conservación de los bosques, en específico, sino también garantizar la sobrevivencia de sus ecosistemas, en el entendido de que una plantación de árboles no hace un bosque[1]. El Bosque está compuesto por toda la biodiversidad existente en este espacio físico, incluyendo a los pueblos originarios como señala, José Mirtembaum; “no hay bosques sin indígenas, ni pueden vivir los indígenas sin bosques”, es una relación de dependencia mutua, casi simbiótica; el bosque proporciona los recursos vitales, para que sobrevivan los pueblos; y los pueblos lo protegen de las diferentes presiones que amenazan su existencia.
En las palabras de Jorge Avila; “…entender la actividad forestal sin el sector indígena es imposible, es decir nos equivocaríamos de cabo a rabo, necesitamos construir una relación seria, solvente, transparente, con los actores indígenas, si queremos que la actividad forestal continúe en este país.”