Una leche evaporada o una crema de leche con textura, con espesor, “con cuerpo” es, generalmente, la que prefieren las amas de casa. Sin embargo, para obtener un producto con esas características, algunas industrias recurren a la carragenina, un extracto que se obtiene de las algas marinas rojas procesadas.
Ese componente, además de la proteína de soya transgénica y aceites vegetales hidrogenados son observados por expertos del Foro Boliviano sobre Medio Ambiente y Desarrollo (FOBOMADE, que aglutina a las agrupaciones de académicos, ecologistas, entre otros grupos) por estar incluidos en algunos derivados lácteos como la crema de leche y la leche evaporada que se comercializan en el país bajo el rótulo de diferentes marcas.
La vicepresidenta de FOBOMADE, Patricia Molina, informó ayer que, a excepción de las leches evaporadas y las cremas de leche de la Planta Industrializadora de Leche (PIL Andina S.A.), todas las restantes, sobretodo las importadas, tienen alguno de esos tres componentes.
Para FOBOMADE, entre los tres ingredientes, el más dañino para la salud de la población es la carragenina porque, según Molina, es causante de úlceras y tumores cancerosos en los intestinos. “Esa sustancia se pega en los órganos digestivos”.
Esto debido a que las células intestinales absorben con facilidad la carragenina, pero no la pueden metabolizar, por lo que ese ingrediente se acumula en las células y produce una ulceración.
CARACTERÍSTICAS
Esas algas son recogidas por pescadores. Después de un lavado, triturado y filtrado, se logra un jarabe transparente que contiene carragenina en solución. Este líquido se somete a otro proceso que finaliza con la obtención de un fino polvo o granulado, insípido e inodoro, de color blanco a beige.
Estos polvos se usan también para gelificar y espesar helados, chocolateados, flanes, pudines, yogures, postres cremosos, quesos, postres en polvo, leche de coco, entre otros. También lo demandan para dar contextura a los dentífricos.
COMPONENTES
Los otros dos componentes no son menos nocivos. La soya, por ejemplo, al haber sido modificada genéticamente, puede ocasionar alergias, resistencia a los medicamentos, daño al hígado y demás.
Mientras que los aceites vegetales hidrogenados son oxidantes y producen problemas cardíacos.
CUESTIONAMIENTO
La controversia sobre la composición de los lácteos surgió a raíz de que la Autoridad Panameña de los Alimentos (Aupsa) suspendió la importación y venta de Pura Vida, del Grupo Gloria, por ser una bebida saborizante y colorante, no una leche.
El director del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), Javier Suárez, informó ayer que el producto de Pura Vida ingresó al país con una certificación sanitaria que tiene el registro de un alimento lácteo evaporado y no de leche.
El Senasag mandó a hacer un análisis de laboratorio de ese producto para verificar los componentes. Los resultados se presentarán el viernes.
Multa
Senasag advirtió que si los componentes de la etiqueta de Pura Vida no coinciden con los del laboratorio, se cancelará el registro sanitario de ese producto, se prohibirá su venta y se multará a la empresa.
50 alimentos alterados se comercializan
El Foro Boliviano sobre Medio Ambiente y Desarrollo (FOBOMADE) y Greenpace identificaron en 2012 al menos medio centenar de productos modificados genéticamente que se comercializan en el país.
Los alimentos transgénicos son creados artificialmente con una técnica que permite insertar a una planta o a un animal genes de virus, bacterias, vegetales, animales e incluso de humanos. El cultivo de los transgénicos comenzó en 1995 con un tomate de larga duración poscosecha
El único comestible modificado genéticamente que tiene autorización de consumo en el país es la soya. La alteración genética de ese producto está respaldada por el Decreto Supremo 24676.
PRODUCTOS
El listado de medio centenar de productos que son modificados y que se comercializan en el país fue oficializado por Fobomade en 2012.
La mayoría de los alimentos que están en esa lista son importados. Entre ellos hay jugos de frutas, chocolatadas, papas fritas precocidas, cubitos de sopa, cereales para el desayuno, papillas para bebés, chocolates, golosinas, pastas. Asimismo, identificaron transgénicos en las papas y los tomates que se importan de Chile.
La presencia de estos componentes es dañina para la salud.
PIL retira término “leche evaporada” y Cocarico pide evaluar etiqueta
El Viceministerio de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor informó ayer que la Planta Industrializadora de Leche (PIL Andina S.A.) retiró el denominativo “leche evaporada” de su producto Pura Vida, que es publicitado en su página web.
La decisión de la empresa de lácteos fue a raíz de una nota oficial que le envió ese Viceministerio, advirtiéndole que estaría incurriendo en publicidad engañosa. Asimismo, Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor anticipó que se reunirá con los representantes de todos los supermercados del país para promover que separen los productos modificados de leche de los lácteos puros. El objetivo es que la población pueda diferenciar una opción de la otra.
ETIQUETA
El ministro de Desarrollo Rural, César Cocarico, anunció que se evaluará la etiqueta de Pura Vida, debido a que el ícono de la vaca y el color del empaque desorienta a los consumidores.
«Cuando uno ve esto (la leche), ve a la vaca y ve también el color, piensa que es leche. Uno no lee siempre lo que se ha escrito en minúscula (…)”.
Añadió que se debe regular esta situación y proporcionar un envase que informe a los consumidores.
Actualmente, la etiqueta de Pura Vida, comercializada como leche, especifica que tiene entre sus ingredientes lecitina de soya, estabilizantes, vitaminas A, C y D, una mínima porción de leche parcialmente descremada, leche de soya y esencia de leche.
En el mercado nacional, los productos Pura Vida son comercializados en agencias de PIL Andina y en el área de lácteos de los supermercados.
Fuente: http://www.opinion.com.bo/opinion/articulos/2017/0607/noticias.php?id=221427
