A dos años de la represión de la Marcha del TIPNIS en Chaparina, el 25 de septiembre de 2011 hasta el momento no existe ninguna imputación formal, siendo que existen abundantes elementos de convicción de los hechos ocurridos los cuales no son valorados. La fiscalía sigue investigando pero ¿hasta cuándo durará esta investigación?
La Constitución Política del Estado, en su Arts. 115 parágrafos I y II reconoce que toda persona, deberá “ser protegida oportuna y efectivamente por los jueces y gozar de una justicia plural, pronta, oportuna y sin dilaciones”, es decir, el derecho a un debido proceso que es una garantía jurisdiccional reconocida por la CPE.
Esta garantía jurisdiccional no está siendo aplicada en forma general y con relación a todo tipo de procesos, ya que la finalidad está relacionada a la aclaración de la situación jurídica de las personas en cuanto no puede extenderse en este tiempo indefinidamente ya que conlleva a la incertidumbre, del accionar de la justicia.
Las víctimas de la represión, hasta el momento no pueden superar los traumas psicológicos vividos. El Art. 113. I señala: “La vulneración de los derechos concede a las victimas el derecho a la indemnización, reparación y resarcimiento de daño y perjuicios en forma oportuna”. Al querer accionar una más de las garantías jurisdiccionales, en este caso el artículo 113 mencionado, no lo pueden hacer puesto que hasta el momento no existen culpables a quien adjudicar este hecho de violación de Derechos Humanos.
Esto constituye una VIOLACIÓN AL DERECHO DE UN DEBIDO PROCESO, o también se puede calificar como DILACIÓN INDEBIDA, que existe cuando se presentan los siguientes elementos “complejidad en el litigio”, la “conducta de los reclamantes”, la “conducta de los implicados” y “las consecuencias dañosas que de la demora se siguen para los litigantes” o “tipo de interés que se ventila”.
Cabe preguntarse si dilación de la justicia es responsabilidad de los administradores de justicia o del gobierno del Estado?
Chaparina se perfila como uno más de los casos con una “Justicia tardía” que equivale a una “Justicia Denegada”.
