Progreso destructivo: Marx, Engels y la ecología
“La vida física e intelectual del hombre está indisolublemente ligada a la naturaleza… porque el hombre es parte de la naturaleza”; la naturaleza es “el cuerpo no-orgánico del hombre”, escribe Carlos Marx en los Manuscritos de 1844. Lo que pega desde sus primeros textos es su anunciado naturalismo, su visión del ser humano como ser natural, inseparable de su ambiente natural. Marx se reclama humanista y define al comunismo como un humanismo que es al mismo tiempo un “naturalismo activo”, la verdadera solución “del antagonismo entre el hombre y la naturaleza”.
E.P. Thompson y William Morris: dos eco comunistas
Si tenemos en cuenta la contaminación de los mares, del suelo y de la atmósfera, así como de las capas geológicas submarinas, el mundo, considerado como una organización química, se encuentra actualmente en regresión. Gases peligrosos procedentes del subsuelo marino se respiran en la tierra y de ahí se elevan hasta la atmósfera con graves consecuencias para el equilibrio biológico del mundo.